A pesar de que yo estudié topografía y he considerado siempre la cartografía como una ciencia, he de reconocer que cada vez me llama más la atención su vertiente artística. Prueba de ello es el mapa del sistema planetario que os traigo hoy. Se trata del sistema planetario de Levi Walter Yaggy. Miradlo bien y decidme si no estáis de acuerdo conmigo: ¡es precioso! Observad con atención todos sus detalles, si necesitáis una versión con más resolución la podéis descargar de la colección de David Rumsey, que como siempre, nos ofrece digitalizaciones de la mejor calidad.
En realidad el original es el de la imagen de abajo. El mapa está realizado sobre una tabla con un diseño de tal manera que permite la retroiluminación para que se vea así.
Forma parte de un conjunto de 4 gráficos que constituyen el «Geographical Study Comprising Physical, Political, Geological, and Astronomical Geography». Son una serie de mapas didácticos pensados para la enseñanza de las ciencias de la Tierra en las escuelas estadounidenses. Se vendían en una carpeta de madera acompañados de un manual para los profesores con instrucciones para su utilización. Los demás también son fabulosos. Son infografías sobre el clima, la geología o la botánica del planeta. Pero a mi me ha impresionado este.
Si observáis con atención veréis que el mapa tiene unas pestañas metálicas. Al abrirlas dejan al descubierto otras zonas del mapa, a modo de cofres del tesoro. En ellas se ven las fases de la luna, la sucesión del día y la noche en las distintas partes del planeta, la cantidad de luz solar según las estaciones del año y hasta un detallado mapa de la Luna.
El mapa tiene ciertos errores y hay que considerarlo más una infografía que un documento preciso. Muestra las estrellas que se ven desde el hemisferio norte pero luego muestra el Sistema Solar desde un punto de vista por encima de él. Tampoco reconoce las órbitas elípticas de los planetas simplificándolas a una simple circunferencia, sin respetar las escalas de distancias entre unas y otras.
Pero a pesar de todo, el mapa está considerado uno de los mapas educativos más impresionantes y hermosos del siglo XIX. El título tiene más mérito, si cabe, teniendo en cuenta que Yaggy no era propiamente un cartógrafo. Durante 25 años fue presidente y accionista de la Great Western Publishing House, en Chicago, una editorial dedicada a la la publicación de mapas y estudios para colegios y escuelas secundarias.
La técnica empleada para conseguir colores y contrastes tan bonitos es la cromolitografía. Consiste en en dibujar sobre una piedra o plancha metálica el negativo de la imagen a imprimir con una pintura a base de materia grasa. A continuación , y aprovechando que el agua y el aceite se repelen, se moja la placa, se impregna de tinta y se posa sobre el papel. Solo las zonas con grasa retendrán la tinta. Para cada color debe utilizarse una plancha distinta.
En 1887 apareció la primera edición y en 1893 la segunda, lo que hace pensar que el sistema planetario de Levi Walter Yaggy se vendió bastante bien.